TïÇ - tåÇ, TïÇ - tåÇ...

... De la relatividad del tiempo, de nuestra forma de percibirlo...

Tic-tac, tic-tac…
veo los segundos pasar
y la manecilla al avanzar,
me hiere cada vez más.

Tic-tac, tic-tac…
siento mi vida escapar,
observo a mi cuerpo sin mi caminar,
me pierdo en la oscuridad.

Tic-tac, tic-tac…
no consigo hablar,
veo mis pensamientos volar,
siento el cuerpo temblar.

Tic-tac, tic-tac…
la muerte me ha de alcanzar,
el tiempo no sabe perdonar,
el espacio es una inmensidad.

Tic-tac, tic-tac…
veo mariposas revolotear,
la lluvia me empapa sin mojar,
en el calor siento helar.

Tic-tac, tic-tac…
jamás habrá de acabar,
se repite sin cesar,
estoy atrapada ya…

ÇïÇlº ê§pëÇT®åL....

...De momentos críticos, de sentires intensos...

Brumas negras
y sol perpetuo,
cadenas tiritan en el cementerio,
surcos del purgatorio,
el espectro regresa a profanar el templo.

De nuevo tú,
manantial en seco,
está lejos noviembre
pero anda tu espectro,
camina entre vivos,
mancilla mis anhelos.

La neblina gris
y el equinoccio de un verano,
uno entre sepulcros,
con ramilletes de recuerdos,
como epitafios estos versos.

La anemia de tus huellas,
lo profano de tu rastro,
tu presencia que es calumnia,
tus destrezas que son de sangre.

Alba oscura por tu esencia,
fantasma hereje de este amor,
fénix negro,
tu vida es en cenizas,
a la muerte es tu resurrección.

El horizonte se perturba,
por la blasfemia de tus sombras,
espíritu inconcluso,
en tus abismos lo hueco,
tu presencia un hoyo negro,
devoras luz, arrasas sueños.

Cirio negro deshonrando el altar,
el ritual d tus ecos,
el rito de tus regresos,
la eterna lucha entre vida y espectro,
entre tangencia y anhelo.

VíT®åLë§...

...uno para su suerte, otro por mi dolor.....

Trazos del paraíso,
un nicho eterno,
cual cal, cárcel sin muros
vitrales de recuerdos.

Ámbar de solsticios,
bermejo entre los cirios,
ardiendo en pueril goce,
de los años que ya fueron.

Pisadas a lo lejos,
ecos de otros lustros
entre juegos y faenas,
edificando mi sentir,
cincelando mis creencias.

Las grietas, cicatrices,
pasajes a otros tiempos,
la evolución del aposento,
los años han pasado,
me inclino al mismo ciervo.

Vitrales enrrejados
purpúreos mis anhelos,
índigo el destello,
la luz sobre un espectro,
de algunas viejas tardes,
de nulas ansiedades.

Dos filas taciturnas,
un menguante justo al centro,
yo llevo la batuta
de las olas de tristeza,
fraternos los consuelos,
la noche se filtra
el mundo se hace inmenso.

Dos alcatraces blancos:
guía y sosiego,
tú eres por la paz,
yo por el silencio,
los vitrales hacen eco.

Se bosqueja eternidad,
entre ramilletes y retratos,
entre amor perecedero,
entre gente que es conciente
de su luto, de su duelo.

Los vitrales se derriten
en iris multicolor,
un silencio de sepulcro,
esperando resurrección,
las lágrimas lo único perpetuo,
la cal, aislando aquel bermejo.

E§Tå§ åQûí....

... De esos cariños plenos lo suficientemente sinceros para hacer sonreír, pero no tan profundos como para hacernos sufrir... gracias... no sé por qué... pero gracias....

Tu mirada aquí,
conmigo, en mi vida,
aferrada a mi ímpetu
a mis ansias de ser.

Tus ojos aquí,
navegando en mis sueños,
dándole vida a una ilusión
a la ilusión de volver a amar,
de hacer de ti mi paz.

Tus palabras aquí,
en mi esperanza,
en los huecos de mi alma,
en esos sitios donde antes hubo nada,
donde el silencio todo lo acapara.

Tú, simplemente tú, aquí,
frente a mi,
mostrándome un nuevo porvenir,
tejiéndole alas a este sentir.

Tu ternura aquí,
mi sonrisa frente a ti,
porque hace tiempo que no conseguía reír,
porque hace tanto que no podía decir
que siento paz, que sé lo que es vivir.

Tu ser aquí,
y yo trémula en la idea
de no poder fingir,
que eres más que una sombra en mi existir,
que eres vida de mis sueños,
que eres muerte del sufrir,
que ante todo, tú sí estas aquí.

ǺMº Lå Må®êå...

Nuestro amor es como la marea,
alto y fuerte en noches de luna llena,
bajo en las de luna nueva,
regido por las estrellas.

Nuestro amor es como la marea
porque borra las huellas en la arena,
porque esculpe la piedra,
porque en su superficie es fiera
y en las entrañas es tierna.

Nuestro amor es como la marea,
cada noche agua nueva…
cada estallido ajeno a la tierra
sin flama es hoguera….

Nuestro amor es como la marea
y no porque sea quimera,
no por ser la primera
más bien por ser eterna.

Nuestro amor es como la marea,
a veces eres luna
y en ocasiones soy mar,
aunque soy yo quien mengua
y tú quien sabe a sal.

Nuestro amor es como la marea
a veces soy sirena
y por lo regular me eres mortal
y no por quitarme la vida
es por ser red
porque consigues atrapar.